Por Augusto Carlos da Costa Cordeiro*
Traducción al Español: Paola Rubio Ferrer
“Además de las habilidades y las cualidades heredadas, la tradición nos hace ser lo que somos.”
~ Albert Einstein
Nuestro pasado y nuestro presente están intrínsicamente ligados al legado del “boca en boca”, a la narración de historias personales que son mucho más que retazos de nuestra existencia; son, sobre todo, registros orales que transmitimos a quienes nos quieran escuchar.
En estos momentos, trabajo en el proyecto Inventario del Patrimonio Intangible de la Municipalidad de Oeiras, municipalidad localizada en los alrededores de Lisboa, Portugal. Cada vez que me detengo a hablar con un artesano sobre su saber tradicional, o sobre su historia de vida, voy con mi grabadora, mi cámara fotográfica, mi cuaderno de notas, y con un sentimiento de dualidad. Por un lado siento tristeza, porque sé que con el fenómeno actual de la desaparición de oficios, costumbres, y rituales que acompañaron la infancia de muchos y la imaginación de otros, estoy en una carrera contra el tiempo, para registrar, inventariar, tratar de salvaguardar y, con suerte, aprender algo de la inmaterialidad, del saber-hacer que estos artesanos poseen.
Por otro lado, siento satisfacción y alegría. Confieso que, como antropólogo, me siento “intruso”, invadiendo y “agitando” las memorias de vida, la casa, el taller de la gente que me da la bienvenida, pero como dice un viejo adagio portugués, “del trabajo y la experiencia, el hombre aprende la ciencia”. Es a través de este contacto profundamente personal y humano como consigo una relación de aprendizaje mutuo, una que me podrá ayudar a perpetuar una tecnología y un conocimiento tradicional verdaderamente únicos.
Estas personas me reciben con el corazón abierto y con la amistad de quien quiere ver su sabiduría transmitida, porque en la mayoría de los casos, estos oficios están desapareciendo o se han extinguido del todo; lo que más les importa es registrar el saber de quien practica el arte para transmitirlo a la memoria futura.
Me gusta siempre hablar del Sr. Aristóteles, artesano de 90 años de edad, espartero de oficio, conocedor del arte de trabajar el esparto (fibra de la que estaban hechas las cestas de los lagares de aceite), una labor y un saber familiar que ha sido pasado de generación en generación. Gran hombre, generoso, trabajador, pero cargando una gran pena: no haber transmitido su conocimiento a nadie que pudiera continuar el arte de producir cestas. Como él mismo dijo, “todos admiran mi trabajo, pero nunca nadie quiso aprenderlo, para unos mi trabajo es muy lindo, y a otros sólo les gusta verlo.”
De su trabajo y saber, antes imprescindible, quedarán apenas memorias y viejas historias contadas para las personas que quieran oírlas, personas como yo – “un antro ¿qué?”- tal como preguntó él, con curiosidad, en nuestra primera conversación. Sus últimas cestas del Lagar de Azeite do Palacio de Oeiras, hechas en medio de una recuperación y con la edad a cuestas, son el trabajo de un artesano más que no hemos sabido valorar como identidad patrimonial. Simplemente desaparecen. Todo lo que resta de los muchos años de sabiduría y del arte del Sr. Aristóteles, son esas cestas del Lagar de Aceite en Oeiras, las que los visitantes ven y luego preguntan con curiosidad «qué es, cómo se hace, de qué está hecho«.
Por este motivo, el patrimonio cultural intangible es crucial, no sólo en Oeiras sino en todas partes, para mantener la cultura y la memoria viva, de cara a la creciente globalización y a la pérdida de las artes y saberes tradicionales. Este trabajo sólo tiene sentido si es hecho con las personas, por las personas y para las personas que realmente intervienen y se interesan por la valorización y preservación de su propio patrimonio, el cual constituye un imporante factor en la identidad de cualquier comunidad.
Nosotros no nacemos dueños de conocimiento iluminado. La alta tecnología de hoy no hace a la tradicional, a la antigua, atrasada. Cuando se habla tanto del sentido de identificación con las mejores prácticas, capitalización de recursos y experiencias de sensibilización, mirar de esa forma a aquello que es considerado como pasado, «nos sitúa en una posición de fragilidad para enfrentar el futuro.» *
“Las nuevas tecnologías, los nuevos gustos, las necesidades de consumo, no van en contra de la excelencia que nos dejó lo tradicional, si sabemos aprovecharlo para crear valor y crear riqueza.” – Jorge Augusto Miranda (2010) ♠
Para más información sobre el Patrimonio Intangible de la Municipalidad de Oeiras, visita el blog del proyecto.
Da tradição viemos e à tradição voltamos
“Para além das aptidões e das qualidades herdadas, é a tradição que faz de nós aquilo que somos”
– Albert Einstein
O nosso passado e também o nosso presente, encontra-se intrinsecamente apegado ao legado de “boca em boca”, ao contar de hstórias pessoais, que são mais que retalhos da nossa existência pessoal. São sobretudo memórias e registos orais que transmitimos a quem nos quer escutar.
No meu actual projecto de Inventariação de Património Imaterial do Concelho de Oeiras, na Câmara Municipal de Oeiras, arredores da cidade de Lisboa, de cada vez que saio para conversar com um artifíce sobre o seu saber tradicional, a sua história de vida, com o meu gravador, máquina fotográfica e bloco de notas, vou com um sentimento de dualidade. Por um lado, de tristeza, pois sei que com o fenómeno de desaparecimento actual de muitos oficios, costumes, rituais, que acompanharam a infância de muitos e o imaginário de outros, estou numa corrida contra o tempo para registar, inventariar, tentar salvarguardar, e com alguma sorte aprender alguma da imaterialidade, do saber fazer, que estes artesãos possuem.
Por outro lado, de satisfação e alegria. Confesso que como antropologo me sinto um “intruso”, invadindo e “remexendo” as memórias de vida, a casa, a oficina das pessoas que me acolhem, mas como diz um velho ditado popular português ”Do trabalho e da experiência aprende o Homem a ciência”, sendo neste contacto humano e muito pessoal que consigo uma relação de aprendizagem mutua que me poderá ajudar a perpetuar a tecnologia e um saber tradicional verdadeiramente únicos.
Estas pessoas recebem-me de coração aberto e com a amizade de quem quer ver a sua sabedoria transmitida, pois na maioria dos casos, são oficios em desaparecimento ou já extintos, mas que importa registar o saber de quem praticava a arte para memória futura. Fez as suas últimas seiras para o Lagar de Azeite do Palácio de Oeiras, aquando da sua recuperação, e já com a idade a pesar, o ofício deste artesão foi mais um que não souberam valorizar como identidade patrimonial. Pura e simplesmente desapareceu. Tudo o que resta dos muitos anos de sabedoria e arte do Sr. Aristóteles são as seiras do Lagar de Azeite em Oeiras, que os seus visitantes com muita curiosidade perguntam «o que é, como se faz, de que é feito«.
Gosto sempre falar do Sr. Aristóteles, artesão de 90 anos de idade, esparteiro de oficio, conhecedor da arte de trabalhar o esparto, matéria da qual eram feitas as seiras para os tradicionais lagares de azeite, labor e saber familiar passado de geração em geração. Homem, generoso, trabalhador, mas com uma profunda mágoa: não ter transmitido o seu conhecimento a ninguém que pudesse continuar a arte de produzir seiras, pois como dizia ele ”todos admiram o meu trabalho, mas nunca ninguém quis aprender, para uns o meu trabalho é muito lindo, outros só gostam de o ver”.
Do seu ofício e saber outrora imprescindível, restarão apenas memórias e velhas histórias contadas a quem as quiser ouvir, pessoas como eu – “um antro quê” – perguntou-me curioso ele na nossa conversa.
Portanto, é crucial para o Património Cultural Imaterial, não só em Oeiras, Lisboa, como um importante factor na manutenção da nossa cultura e memória, face à crescente globalização e à perda das artes e saberes tradicionais, que este trabalho se salvaguarda seja feito com as pessoas, pelas pessoas e para as pessoas, pois são elas os intervenientes e interessados na valorização e preservação do seu próprio património que constitui um importante factor de identidade da comunidade.
«Nós não nascemos donos do conhecimento iluminado. O Hi-tec de hoje não faz com que o tradicional, o antigo seja atrasado.» Quando se fala tanto de sentido de identificação de boas-práticas, capitalização de recursos e experiências e sensibilização, olhar dessa forma para o aquilo que é considerado passado «coloca-nos numa posição de fragilidade face ao futuro.» *
«As novas tecnologias, os novos gostos, necessidades de consumo vão sim ao encontro da excelência daquilo que o tradicional nos deixou, se o soubermos aproveitar para criar valor e criar riqueza.» (Miranda, Jorge Augusto 2010) ♠
Para más información sobre el Patrimonio Intangible de la Municipalidad de Oeiras, visita el blog del proyecto.
Referencias:
*Entrevista con Miranda, Jorge Augusto. Revista 30Dias em Oeiras nº162 DEZ, pp 5-11, CMO, 2010
Fotografía del Inventario del Patrimonio Intangible de la Municipalidad de Oeiras: CMO (Todos los derechos reservados)
Fotografía de las cestas «Lagar de aceite de Oeiras»: Diana Santos Coelho (Todos los derechos reservados)
Augusto Carlos da Costa Cordeiro Licenciado en Antropología en el Instituto Superior de Trabajo, Ciencia y Empresa – Instituto Universitátio Lisboa – ISCTE-IUL. Antropólogo de la División de Património Histórico y Museológico (DPHM) de la alcaldía de Oeiras, Lisboa, Portugal, y responsable de la preparación del Inventario del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Municipalidad de Oeiras. Trabaja principalmente esta temática y es colaborador de la revista 30Días en Oeiras, donde ha publicado vários artículos relacionados con este proyecto. Puedes escribirle a Augusto.cordeiro@cm-oeiras.pt o a Augusto.cordeiro@gmail.com. Encuéntralo en Twitter como @ac_cordeiro.
Otra cosa «muy importante» que queda, es «el placer personal» que obtuvo, de todos los anos de oficio.
Pingback: El arte tradicional de los molineros « antropoLOGIKA·
Pingback: De la tradición venimos y a la tradición volvemos- antropoLOGIKA · Revista Digital - Oeiras com História·